Londres, 1963. Buster Edwards es un delincuente bonachón de poca monta que roba para poder mantener a su esposa June y a su hija Nicky. Suele ser bastante cuidadoso con lo que hace y jamás ha pasado más de dos semanas en la cárcel. De vez en cuando, también consigue algún trabajo, pero mucho de su dinero se le va tristemente en el juego. La vida de Buster pega un cambio cuando se le presenta la oportunidad de involucrarse en el mayor robo de la historia de Inglaterra: atracar el tren correo de Glasgow. El botín del robo, planeado con más amigos, está valorado en un millón de libras. Cuando la policía descubre que el protagonista tiene que ver con el robo, Buster se verá obligado a huir en la más absoluta de las clandestinidades. La película, basada en hechos reales, tiene como actor principal al cantante Phil Collins, que pasó la mayor parte de su juventud ejerciendo de actor y modelo.