Alerta Spoiler El FINAL de "Bullet Head: Trampa mortal"
Reparto
Adrien Brody como Stacy
Antonio Banderas como Blue
John Malkovich como Walker
Rory Culkin como Gage
Ori Pfeffer como The Handler
Alexandra Dinu como Grace
James Robinson como Young Gage
Kitodar Todorov como Referee
Velizar Binev como Old Man (uncredited)
Jay Bogoslovov como K-9 Cop
Deyan Petrov como Young Walker
Jason Francis como Young Gage's Father
Clive Sawyer como Truffle Dog Master
Keith D. Evans como Security Guard
Mark Theodore Richards como The Russian's Owner
Tihomir Vinchev como The Russian's Handler
Dimiter Doichinov como Second Cop
Owen Davis como Chef
Josh Ethier como The Ride
Galería de imágenes
Ficha técnica
- Año: 2017
- Fecha de estreno: 07/12/2017
- Duración: 93 minutos
- Género: Crimen, Drama, Suspense
- Dirección: Paul Solet.
- Guion: Paul Solet.
- Puntuación: 4.9/10 (409). IMDb
- Ver en Amazon: Bullet Head: Trampa mortal
Los 3 ladrones se ven amenazados por una bestia de perro asesino. Un perro de pelea que Antonio Banderas adiestró con malas artes para lucrarse.
El más joven cuenta el trauma de cuando niño su padre mató delante suya a un perro que él cuidaba y quería. Tras recordarlo se mete una sobredosis y muere.
Adrien Brody casi es alcanzado por el bicho pero es el perro quien queda atrapado bajo un piano, empieza a llorar y a Adrien le da pena y lo libera. El perro no le ataca, se va.
Brody y Malkovich recogen la pasta de las apuestas de las peleas de perro y cuando van a huir aparece Banderas, mata a Malkovich. Brody malherido escapa hasta el lugar donde se pelean los perros, cuando Banderas está a punto de matarle el perro aparece y mata a Banderas. Banderas mata al perro.
Brody aparece en una playa con su novia acompañado de un perro cachorrito.
FIN
«Bullet Head» es una de esas películas que parece que va a ir por un lado —típico thriller de criminales en apuros— pero te sorprende con una vuelta bastante original: un perro asesino como amenaza principal.
La cosa arranca después de un robo que sale mal. Tres ladrones —Adrien Brody, John Malkovich y Rory Culkin— se refugian en un viejo almacén industrial. Están heridos, nerviosos, y con la policía rondando. Hasta ahí, todo en la línea de un thriller criminal… pero el giro viene cuando descubren que no están solos. Resulta que en ese mismo lugar hay un perro brutalmente entrenado para peleas, que se ha desatado y los empieza a acechar como una bestia salvaje.
El perro no es solo un animal más, es una presencia constante, violenta y simbólica. Fue adiestrado con pura crueldad por un tipo siniestro que aparece después en escena: Antonio Banderas, en un papel frío, calculador y sin una gota de compasión. Tremendo.
Cada uno de los personajes va soltando sus traumas mientras esperan una salida. El más joven (Culkin) recuerda con dolor cómo su padre mató a un perro que él quería cuando era chico. Esa escena es tremenda, porque te explica el apego que tiene con los animales y su vacío emocional. Poco después, se mete una sobredosis y muere. Es un momento triste pero muy humano.
Adrien Brody, que es el personaje más empático del grupo, tiene varios encontronazos con el perro. Hay una escena brutal en la que el perro queda atrapado bajo un piano, empieza a llorar y Brody —en lugar de rematarlo— lo libera. Y lo loco es que el perro lo entiende: no lo ataca, simplemente se va. Ahí ya sabés que este no es un simple animal violento, es una víctima más de toda la podredumbre que lo rodea.
Cuando parece que pueden escapar, aparece Banderas, mata al personaje de Malkovich, y se enfrenta a Brody. La pelea final es en un lugar donde hacían peleas ilegales de perros. Justo cuando Banderas va a matar a Brody… ¡aparece el perro! El mismo que perdonó la vida de Brody. Lo ataca con todo, pero Banderas alcanza a matarlo también. Es un final durísimo.
La última escena es un bálsamo: Brody, malherido pero vivo, aparece en la playa con su novia. Está tranquilo, sereno… y con un cachorro al lado. Un símbolo claro de que quiere empezar de cero, con una nueva relación con los animales y con la vida.