Doce MonosEl futuro ya es historia

James Cole (Bruce Willis), un preso violento en 2035, viaja en el tiempo, al pasado, a 1990 para encontrar el virus que acabó con el 99% de la población mundial y que obliga a los supervivientes a vivir bajo tierra.

Obviamente nadie le cree, la psiquiatra Railly (Madeleine Stowe) lo interna en un psiquiátrico. Allí coincide con Jeffrey Goines (Brad Pitt) que le habla de lo podrida que está nuestra sociedad consumista y maltratadora de animales. Cuando intenta escapar lo reducen y encierran en una sala. Al rato ha desaparecido, nadie sabe como. Los científicos de 2035 lo han traído de vuelta a la prisión. Le dicen que debe volver y buscar al «Ejército de los doce monos», culpables de la pandemia.

Esta vez vuelve al tiempo correcto, a 1996, justo antes de la primera infección del virus. Secuestra a la psiquiatra y juntos buscan al «Ejército» y a su líder Goines (Brad Pitt). Este le dice que fue el mismo Cole (Bruce Willis) quien le dio la idea de todo en el hospital, en 1990. La policía termina encontrándolos y vuelve a desaparecer, de vuelta a 2035 con los científicos.

La psiquiatra empieza entonces a creer la versión de Cole. La bala que tenía en la pierna es de la Primera Guerra Mundial y sabía cómo acabaría la noticia del secuestro de un niño. Ella va entonces al cuartel de Goines donde se reencuentra con un Cole desanimado, piensa que está loco, que todo está en su cabeza pero cuando recuerda perfectamente el mensaje que Railly dejó en un buzón de voz se dan cuenta ambos de que Cole no está loco, de que lo que cuenta es real y va a suceder.

Tras esta liberación ambos deciden estar juntos y pasar los últimos días antes de que llegue el virus en la playa. Se disfrazan y se dirigen al aeropuerto. Cole se ha extraído los dientes para que no lo encuentren.

Goines (Brad Pitt) secuestra a su padre pero no para robarle el virus, lo que hace es liberar a los animales del zoo y dejarle a él (Christopher Plummer) en una jaula.

En el aeropuerto, Jose (Jon Seda), su compañero preso de 2035 le entrega una pistola a Cole, le dice que debe terminar su misión. Quien lleva consigo el virus y va a viajar a varias ciudades para soltarlo es el Dr. Peters (David Morse), ayudante del Dr. Goines y obseso del apocalipsis. Cuando Cole saca la pistola para matar a Peters es abatido por la policía. La psiquiatra lo ve morir en sus brazos y mira sonriendo a un niño.

Es el sueño recurrente que Cole tiene durante toda la película. Él se vio morir a sí mismo. La psiquiatra sabe al ver al niño que era verdad lo que le contaba y además sabe que vivirá una y otra vez esos momentos con Cole. Se puede viajar al pasado pero no se puede modificar. De hecho a Cole lo mandan no para evitar el contagio sino para conseguir una muestra con la que trabajar en 2035.

La última escena sucede en el avión, al lado del Dr. Peters está una de las científicas de 2035, le dice que trabaja en una aseguradora. Suponemos que como Cole ni ningún voluntario han tenido éxito en sus misiones la misma científica ha viajado en el tiempo para conseguir esa muestra.

FIN