Money Monster

Kyle Budwell (Jack O’Connell) pone un chaleco explosivo al excéntrico presentador Lee Gates (George Clooney) y exige una explicación en directo de cómo se perdió la inversión que muchos han perdido siguiendo el consejo de Gates.

La policía logra evacuar a todos, el plan es disparar al chaleco que lleva puesto Gates y luego acabar con Kyle pero la productora Patty Fenn (Julia Roberts) avisa a Gates.

Deciden salir del estudio con un cámara en busca del que tiene la explicación: Walt Camby (Dominic West).

En su camino por las calles de Nueva York la gente le corea con la famosa frase «Show me the money» de Jerry Maguire. Gates simpatiza con el pobre Kyle. Se esconde tras él para que no le dispare la policía al chaleco, Kyle le confiesa que el chaleco no lleva explosivos sino simples ladrillos. Gates simpatiza aún más y finge que sí los lleva.

El productor Ron se les acerca y Kyle nervioso le dispara e hiere. Pide perdón y la gente huye.

Llegan a la oficina de Camby que ha sido engañado por su Relaciones Públicas. Kyle le dice que se ponga el chaleco de Gates. Gates le entrevista en directo siguiendo las instrucciones de su productora. Desvelan al público en directo el fraude, no había sido un error técnico como alegaba, Camby había sacado el dinero para hacer otra inversión que no logró.

Aunque Camby dice que todo es legal Kyle le obliga a decir lo único que desea, que admita fue un error.

Una vez que Camby lo admite Kyle quita su dedo del activador del chaleco a sabiendas de que la policía le disparará. Kyle muere.

Gates desconsolado se dirige a Camby y lo tumba de un puñetazo.

En la última escena en la sala de espera del hospital Patty le lleva comida a Gates. En la televisión dicen que se abrirá una investigación a Camby y su programa informará sobre ello.